Capítulo 11

Capítulo 11
Kanji	カゲささやく
Rōmaji	Kage sasayaku
Volumen	3
Páginas	45
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El susurro de las sombras (カゲささやく, Kage sasayaku) es el título del décimo primer capítulo del manga de Shigatsu wa Kimi no Uso. Está contenido en el tercer volumen que se publicó el 17 de mayo del 2012.

Personajes

Lista de personajes por orden de aparición:

• Kousei Arima
• Tsubaki Sawabe
• Kaori Miyazono
• Nao Kashiwagi
• Ryota Watari
• Saki Arima (Flashback)
• Emi Igawa
• Takeshi Aiza

Argumento

Kousei y el gato.

Sentado solo en un columpio, Kousei ve a un gato negro y empiezan una conversación. Perdido en sus pensamientos, Arima contesta a lo que le dice el pequeño animal.

Ya se acercan las competencias y el gato le dice que aunque falle no importa ya que él no es ni Bach ni Beethoven. ¿Quién eres? ¿Dónde estás? ¿Listo para el viaje?

Watari en el partido.

En la actualidad, el encuentro distrital de fútbol toma lugar y, eufóricamente, Tsubaki y Kaori alientan a Watari. Ryota es un as del deporte y con gran destreza logra atravesar la cancha con el balón.

Finalmente, Watari patea la pelota con gran fuerza logrando que ésta llegue al arco contrario; sin embargo, le da al travesaño. El sonido del silbato marca el final del partido y lamentablemente no pudieron ganar.

A pesar de todo, Watari mantuvo la compostura y animaba a sus compañeros de equipo a no llorar por la perdida; mientras que Kousei y los demás aplaudían su esfuerzo.

Watari llora tras perder.

"No me convertí en una estrella, ahora es tu turno." Después de dedicarle aquellas palabras a Kousei, Watari se va a las duchas.

Completamente solo y en silencio, Ryota promete no fallar nunca más y que se convertirá en una estrella cuando entre al instituto.

Totalmente derrotado, por fin se desahoga y empieza a llorar. Todas las competencias deportivas finalmente terminaron.

El día del concurso de Maihou está cada vez más cerca, y Kousei ya es capaz de tocar las piezas del concurso sin ver las partituras, pero algo no está bien.

Kousei se desmaya en atletismo.

Desconcentrado en las clases, Arima piensa como Tsubaki y Watari brillaron en sus competencias; y Kaori, totalmente inspiradora... ¿Y él? ¿Sería capaz de hacer de las piezas de Bach y Chopin suyas?

¿Dónde estoy? Perdido en sus pensamientos, Kousei se tropieza en plena clase de atletismo y cae al suelo.

Kousei come en la enfermería.

Una preocupada Kaori corre a la enfermería para ver cómo se encuentra "el amigo A"; pero al parecer no estaba tan grave, ya que disfrutaba de unos sándwiches de huevo tranquilamente.

Camino a casa, Kaori le llama la atención ya que sufrió un desmayo por culpa de no alimentarse bien. Pero no puede evitarse, Kousei está inmerso en la preparación del concurso.

Tomando leche de una cajita, Kousei siente una extraña sensación. Un gato negro se detiene ante ellos. Kaori luce feliz, pero él recuerda al gato negro de sus pensamientos y cae al suelo.

Kousei habla de "Chelsea".

Ya calmado, sentados ambos en el parque, Arima cuenta su historia. Una vez él tuvo una gata negra llamada Chelsea por comer muchos dulces.

Sin embargo, Chelsea una vez le hizo unos rasguños en las manos, por lo que su madre la botó de la casa al día siguiente.

"Es por tu bien." él siempre se arrepintió de no detenerla de echar al animal, y cada cicatriz que le dejó su gata le hace recordar a su mamá. Todas esas miradas y apodos que recibía siendo un niño. Si tan sólo lo hubiese detenido, las cosas hubiesen sido distintas. Desde ese momento, entendió que estaría bajo la sombra de su madre.

"Tú eres tú."

"Tú eres tú." Kaori le menciona que hay muchas cosas que lo distinguen del resto, como su gusto a los sándwiches de huevo o que es malo en deportes.

Él es lo que es, por lo que no está bajo la sombra de nadie. Además, le menciona que hay límites en lo que los profesores de música enseñan.

A pesar de que su objetivo es que aprendas los diferentes estilos de los compositores en diferentes épocas, no es así.

"Nosotros no somos ni Bach ni Chopin. Simplemente toca, sinceramente, con todo tu ser."

Kaori y Kousei juntan sus manos.

Kousei se sorprende de las palabras de Kaori y extiende sus manos preguntándose cómo es tocar "sinceramente".

Repentinamente, Kaori se pone delante de él y junta su mano con la suya. Kousei se sonroja y se exalta. Ella observa su manos, manos grandes y dedos alargados; realmente manos de pianista.

"Tu mano está feliz de tocarme." "Tu mano está ansiosa por tocar el piano." Tal vez, la respuesta a todo el problema es más simple de lo que uno cree.

Kousei decide creer en la música.

A un día de la competencia, Kousei se encuentra nuevamente con el gato de sus pensamientos.

Éste le reprocha que aún no puede oír las notas, pero Kousei le responde que "una chica que conoce cree fuertemente en el poder de la música", por lo que él también intentará empezar a creer en ella.

Al parecer ya está preparado, por lo que el gato le pide que descanse, ya que probablemente "aparezca", y el día de la competencia será alocado.

"Twinkle Twinkle Little Star"

Al día siguiente, Kousei que aún está dormido, es sacado a la fuerza de su casa por Tsubaki.

Watari y Kaori están con ellos por lo que, finalmente, todos dan rumbo al auditorio de conciertos donde se llevará a cabo el concurso.

Al llegar al lugar, Arima aún parece desorientado y sus amigos se preguntan si estará bien.

Nuevos rivales.

Kaori, que leía la lista de participantes del concurso, golpea a Kousei en la espalda para mostrarle su descubrimiento.

¡El número de participante! Kousei es el n° 265, y Kaori se emociona, ya que la pieza 265 del catálogo de Köchel es "Twinkle Twinkle Little Star" de Mozart.

¡Las estrellas brillarán para ti! Aunque sea un dato que tal vez no tenga tanta importancia, Kousei se alegra y logra sonreír.

Sin más preámbulos, Kousei entra al recinto, sube las escaleras y se encierra en sus pensamientos. Ve algunos de sus próximos rivales y sabe que el momento crucial está cada vez más cerca.

"La estrella del alba. Un encuentro con mi pasado... La competencia empieza."